En la Universidad de Tel Aviv realizaron un reciente estudio cuyos resultados indican que quienes suman un postre a su desayuno tienen niveles más bajos de grelina, hormona también llamada “del hambre”.
De este modo, estas personas bajarían de peso de manera más efectiva que aquellos que siguen una estricta dieta hipocalórica y baja en carbohidratos.
Según resume el sitio ultimahora.com, los reducidos niveles de grelina hacen que la gente no quiera volver a comer los alimentos calóricos (el postre) que ingirieron en la mañana, provocando así una disminución del peso corporal.
El estudio, publicado en el Daily Mail, analizó a 193 mujeres y a la misma cantidad de hombres, todos con obesidad, pero sin diabetes tipo 2. Los participantes fueron dvididos en dos grupos: el primero realizó una dieta baja en carbohidratos y proteínas, y el segundo hizo un régimen con altas dosis de ambos nutrientes.
Después de 4 meses, ambos grupos bajaron unos 15 kilos, aproximadamente. Sin embargo, transcurridos otros 4 meses, los que hicieron la dieta baja en carbohidratos recuperaron alrededor de 10 kilos de peso.
“Aunque la restricción dietaria con frecuencia resulta en una pérdida de peso inicial, la mayoría de las personas obesas que hacen dieta no pueden evitar recuperar el peso”, explicaron los realizadores del estudio.
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Fuente: mujeres.grupopublimetro.cl/
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